Todos sabemos que existen provisiones en la contabilidad pero, ¿conocemos su contenido y efectos?
La provisión para impuestos es el importe estimado de deudas tributarias cuyo pago está indeterminado en cuanto a su importe exacto o a la fecha en que se producirán. Corresponde contabilizarlas dentro del pasivo no corriente, no obstante si se espera que su cancelación se produzca en un corto plazo, deberán figurar en el pasivo corriente.
Al ser un importe estimado, todos los cambios que se puedan producir se tendrán que contabilizar para reflejar los cambios aumentando o disminuyendo el valor contra la cuenta de gasto o de exceso de provisión para impuestos. Hasta que la deuda no sea cierta no se reconocerá como deuda con la Administración.
Si existiera un error contable de no reconocer una provisión en ejercicios anteriores, esta se hará con cargo a reservas y se debe mencionar en la memoria correspondiente ya que producirá cambios significativos en las Cuentas Anuales.
Siempre habrá que tener presente el impacto final en el resultado contable y por ello los gestores deberán valorar la decisión en la fecha de cierre del ejercicio.
